Oración a la Virgen María de la Medalla Milagrosa

Sin son de tu agrado las oraciones a la grandiosa Virgen María, te invito a que continúes leyendo este artículo, aquí te estaremos mostrando la espectacular Oración a la Medalla Milagrosa y muchas oraciones más, también tenemos información al respecto, esperamos que esto sea de un total agrado para ti.

oracion a la medalla milagrosa

Virgen María

María es la madre de Jesús, siendo ella de descendencia Judía. La inmaculada María es reconocida mundialmente por las diferentes religiones del cristianismo, catolicismo y muchas más, la cuales terminaron por integrar el Canon Bíblico (La palabra canon deriva del nombre griego «kanon»,  el canon bíblico es el encargado de reconocer los 73 libros como parte de la Sagrada Escritura, el cual está comprendido de 46 escritos para el Antiguo Testamento, y 27 para el Nuevo Testamento, marcando estos, la clave fundamental de la historia.

Oraciones a nuestra señora Virgen María

Antes de conocer la Oración a la Medalla Milagrosa, debemos tener en cuenta que existen muchas oraciones más a la inmaculada Virgen María, además cada una de ellas contienen un alto contenido espiritual, el cual es  muy fundamental y principal para las diferentes regiones del catolicismo, a continuación te mencionaremos algunas de las oraciones de la inmaculada Virgen María.

«Oh María, sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti. Sin tardanza pregona lengua mía las glorias y alabanzas de María. Atiende a mi socorro, gran Señora, y ampárame tu diestra protectora. Oh Jesús, que te has dignado glorificar con innumerables milagros a la bienaventurada Virgen María, inmaculada desde el primer instante de su concepción, concédenos que los que imploramos su protección en la tierra, podamos gozar eternamente de tu presencia en el cielo, tú que con el Padre y el Espíritu Santo vives y reinas, Dios, por los siglos de los siglos. Amén.»

«Oh Jesús, que para realizar tus mejores obras, escogiste las cosas débiles del mundo, a fin de que ninguna se gloriara ante tu presencia, y que para aumentar y difundir la fe en la Inmaculada Concepción de tu Madre, quisiste que la Medalla Milagrosa se manifestara a santa Catalina Labouré, concédenos que llenos de esa humildad podamos glorificar este misterio con alabanzas y obras. Amén.»

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Oración a la Medalla Milagrosa

«Oh Medalla de María Milagrosa, sé mi escudo y protección contra todo dardo incendiario del maligno. Que mi ser físico y espiritual a través de tu Medalla Milagrosa, permanezcan unidos a ti, Madre Milagrosa. Que tu santa medalla me libre de todo mal y peligro; que tu santa medalla me proteja de toda enfermedad, pestes y virus; que al invocar tu santa plegaria: «Oh María concebida sin pecado, rogad por nosotros que recurrimos a Ti», sea yo, mi familia y seres queridos, protegidos de toda calamidad y muerte imprevista.»

«Oh Medalla Milagrosa, protege mi hogar y bienes materiales de todo desastre natural, protege mi vida espiritual y todo mi ser; ampárame madre mía, con el escudo protector de tu medalla; dichoso aquel que la lleva puesta como coraza en su cuerpo y en su alma, porque Tu protección estará con él de noche y de día. Gracias Madre Mía, por tu coraza espiritual, que aleja de mí, al invisible espíritu del mal»

 «Oh medalla de María Milagrosa, en los momentos de peligro: por favor Cuídame»
«Oh medalla de María Milagrosa, de las pestes y enfermedades: por favor Cúrame»
«Oh medalla de María Milagrosa, del enemigo de mi alma: por favor defiéndeme»
«Oh medalla de María Milagrosa, de los desastres naturales e imprevistos mi hogar y bienes materiales: Por favor Protege»,  «Y en la hora de mi muerte, que la luz de tu Medalla Milagrosa, me guíe a la Gloria Eterna. Amén.»

La Oración a la Virgen de La Medalla Milagrosa, consiste en una extraordinaria plegaria que hacen los diferentes creyente de esta Virgen María, con la finalidad de obtener una mejor protección en el día a día de cada una de la personas que poseen esta medalla. Esta oración tiene una festividad la cual se realiza los 27 de noviembre, ya que para esta fecha según la historia, La Virgen María hizo una solicitud a la Santa Catalina Labouré, para que ésta procediera a la construcción de esta grandiosa Medalla Milagrosa. La medalla milagrosa, fue diseñada gracias a las diferentes indicaciones que dio la Virgen María a Santa Catalina Labouré, donde se le apareció tres veces aproximadamente.

La primera aparición

Esta primera aparición fue dada en la noche entre el 18 y 19 de Julio de 1830, en medio de la nada un niño, quizás un pequeño Ángel de la guarda, comienza a despertar a la hermana Catalina Labouré( hoy en día se conoce como una Santa), quién era aquel entonces tan solo una novicia de la  comunidad de las Hijas de la Caridad en París España,  aquel pequeño niño le pidió a esta novicia que por favor se dirigiera a la capilla, y esta sin pensarlo dos veces decide ir. Estando ya en la capilla, Catalina la novicia se reúne con la Virgen María, instalando una gran conversación por más de dos horas aproximadamente, donde la Virgen María le encarga una misión a esta mujer.

La segunda aparición

La Virgen María le dio esta misión a Catalina en la noche del 18 de Julio mientras esta meditaba. La novicia Catalina podía ver a la Virgen María parada en una especie de medio globo donde en sus manos ella tenía una gran esfera de color dorados, la cual podía verse de cualquier ángulo, donde la Virgen María se estaba ofreciendo al cielo. En el momento de esta aparecieron la virgen María le cuenta a la novicia Catalina que esta espectacular esfera estaba en representación del mundo, pero su gran prioridad representaba a Francia.

En Francia, los momentos en ese tiempo era difíciles para las diferentes personas que habitaban ahí, especialmente para los pobres que se encontraban sin empleo y los diferentes refugiados de la guerras que se dieron en esos tiempos. La virgen María tenía unos anillos en sus dedos, de los cuales salían muchos rayos de luz, mientras ella sostenía la espectacular esferas,  la novicia Catalina queda encantada por tan semejante belleza, y la Virgen María le comienza a explicar el significado de los rayos, diciéndole que estos representaban la gracia que ella tiene para las diferentes personas que le quieran pedir.

La novicia Catalina se da cuenta que hay unos anillos que permanecen apagados, lo cual creó mucha inquietud en ella, por tal motivo la Virgen María le explica que estos permanecen así, porque no hay nadie que le pida a ella las gracias de su espíritu, y que por tal motivo estas permanecen en una especie de reposo, la cuales deberían de ser despertadas.

La tercera aparición

En esta tercera aparición dio un giro, ya que la virgen María aparece esta vez, de pies sobre un globo con sus hermosos brazos estirados  y de sus manos y dedos salen la luz dorada espectacular, en el medio de toda esta belleza, la novicia Catalina queda una vez más totalmente encantada, tras la nueva aparición de la inmaculada Virgen María. En esta, se puede apreciar a lo largo de su belleza unas palabras que decían «Oh María, sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti»

Entonces María le dice a Catalina que extendiera su grandioso mensaje, y que hiciera una hermosa medalla con el modelo que ella le había pedido, diciéndole que todo aquel que llevara puesta esta medalla iba a recibir sus más grande bendición en especial si la persona la llevaba alrededor de su cuello. La novia Catalina confiesa esto a su confesor, describiendo todo detalladamente en relación a cada una de las apariciones, pero no fue hasta su muerte que esta novicia reveló los detalles de la medalla a los 47 años de edad, ya que según ella , en esa misma fecha fue que la virgen le dio la descripción de esta medalla.

Años más tarde gracias a la aprobación de la iglesia, se dieron las creaciones de las primeras Medallas, las cuales fueron distribuidas en París en el año de 1832, tras la entrega de estas Medalla fue casi de inmediato la promesa que había hecho la Virgen María sobre cada una de la persona que la tenían, haciendo que la devoción se propagara como un rayo de luz, llenando de salud, gracias y bienestar  para todo aquel poseedor de esta Medalla, por tal motivo se le consagró el nombre de La Medalla Milagrosa. No existen hasta los momentos ninguna superstición sobre esta Medalla, ya que esta no es un amuleto, es una Oración a la Virgen Milagrosa mediante su Medalla.

Significado de la parte delantera de la Medalla Milagrosa

En esta parte delantera de la medalla podemos apreciar la presencia de la Virgen María, la cual se encuentra de pies sobre un globo y está aplastando la cabeza de una fea serpiente, haciendo esto para que las personas puedan entender que Satanás y todos sus seguidores, no tienen ningún poder sobre ella. Cuando está de pies sobre el globo con sus brazos extendido, quiere decir que ella es la única reina en el cielo sobre el mundo y la tierra.

Significado de la parte trasera de la Medalla Milagrosa

En esta parte de la Medalla, esta se encuentra totalmente rodeada por doce estrellas la cuales están rodeando a su vez a un letra «M» la cual está sobre una cruz, y debajo de esta letra, están dos especies de corazones donde de cada uno de ellos salen llamas de fuegos, y uno tiene una espadas clavada y el otro está rodeados por muchas espinas. Todo esto haciendo referencia con un significado en lo siguiente. Las doce estrellas representan a los doces apóstoles de la iglesia que siguen a María, la cruz representa al grandioso Cristo, la letra «M» hace énfasis en representar a la Virgen María.

Ya que esta «M» se encuentra sobre una cruz dan a representar que María tiene una estrecha relación con Jesús en el mundo. Los dos corazones representan el gran amor que tiene nuestra señora Virgen María y nuestro Padre Jesús sobre cada una de la personas existentes en este cruel mundo. La oración a la Medalla milagrosa consiste en pedir diferentes clemencias y bendiciones a nuestra señora Virgen María.

Oración de consagración a la Virgen de la Medalla Milagrosa

«Oh Virgen, Madre de Dios, Inmaculada María, nos ofrecemos y consagramos a ti, bajo el título de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa. Que esta Medalla sea para cada uno de nosotros, prenda del amor que nos tienes, y nos recuerde nuestros deberes para contigo. Que siempre que la llevemos nos bendiga tu amorosa protección, y nos conserve en la gracia de tu Hijo. Oh Virgen poderosa, consérvame siempre a tu lado en todos los instantes de nuestra vida. Concede a estos hijos, la gracia de una buena muerte, para que en unión contigo podamos gozar para siempre de la eterna felicidad. Amén.»

Esta espectacular oración, trata sobre diferentes plegarias que hacen las personas para pedirle a La virgen María diferentes favores para ellos mismo o para otras personas, donde comienza pidiéndole a ella con un » Oh Virgen, Madre de Dios». Es una oración que se le ofrece a la inmaculada María bajo el nombre de  Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, donde está lo llena de amor y para que las personas recuerden los diferentes deberes que tiene para ella, también se le pide que le de la protección necesaria que se necesita para andar cada día con el amor y la seguridad de ella.

Esta oración a la Inmaculada Virgen, donde la persona le pide por su amor y seguridad, también debe hacerle una pequeña promesa a la Virgen María la cual consiste en siempre ser devoto a ella y nunca olvidarla aun ni en los lechos de muerte, pidiéndole que conserve siempre a cada uno de nosotros como su principal acompañante e ilumine cada uno de  nuestros pasos.

Acto de consagración a la Virgen de la Medalla Milagrosa

«¡Oh Virgen Santísima, Madre de Dios y Madre de los hombres y de las mujeres, Reina y defensora nuestra Santísima Virgen de la Medalla Milagrosa! Venimos aquí para consagrarnos a ti ante este hermoso altar  y nuestra acogida imagen, y ofrecemos el homenaje de nuestra vida y de nuestro amor, para felicitarte, como hijos tuyos, por los incomparables privilegios con que Dios te adornó desde el primer instante de tu concepción inmaculada, y para alegrarnos contigo por la gloria sublime de que ahora gozas en el cielo. Amén»

Aquí se le dice pide a la virgen María que la persona la acoge en su  casa así como hizo el apóstol Juan, para aprender de ella y convertirse en un hijo más de esta Inmaculada Virgen María de la Medalla Milagrosa, se le pide que ruegue por las persona para que el espíritu Santo le de mucha abundancia, ya que este es fuente de vida según los creyentes de esta religión del Catolicismo, se encomienda a ella a todas las personas comenzando por las más débiles, lo cuales son , los niños y personas que están en medio de la pobreza y el hambre. En esta oración también se le pide por las diferentes familias que están rotas y todos esos jóvenes que están perdidos en el mundo del mal.

Se le ofrece a esta Aurora de Salvación la confianza de los caminos de la personas, para que esta sea la principal guía para que todos los hombre puedan descubrir el amor hacia el Cristo salvador y Dios, quien es este el creador del cielo y la tierra y todos ser viviente en ella.

Oración a Nuestra Señora para la sanación

«María Inmaculada, tú te nos has dado a ti misma como nuestra Señora de la Medalla Milagrosa. Tú nos has pedido que oremos con confianza prometiendo que así recibiremos grandes bendiciones. Sabemos de tu compasión, porque tú viste a tu Hijo sufrir y morir por nosotros. En tu unión con su sufrimiento, te hiciste la Madre de todos nosotros.
María, madre mía, enséñame a entender mi sufrimiento como lo haces tú y a soportarlo en unión con el sufrimiento de Jesús. En tu amor de madre, calma nuestro miedo y aumenta nuestra confianza en el misericordioso amor de Dios.»

«Según el plan de Dios, consigue para mí la curación que necesito. Intercede ante tu Hijo, para que me dé la fuerza que necesito para trabajar para la gloria de Dios y la salvación del mundo. Amén. María, salud de los enfermos, ruega por mí.»

Esta es una pequeña plegaria que se le hace a la Inmaculada Virgen María, donde la persona que realiza la oración, le pide por su salud, la cual comienza a hacer énfasis en los dolores que aguanto esta apreciada Virgen María cuando vio a su hijo Jesús que fue sometido a diferentes torturas, y ella tuvo la fuerza de seguir adelante y soportar todo eso, es por esa misma fuerza que ella tuvo, que le piden sus muchos seguidores, para que le dé a todas esas personas enfermas las fuerzas necesarias para que se sanen y para que puedan aumentar aún más la gran fé que se le debe de tener hacia Dios.

Esta oración va acompañada de otras plegarias más, entre ellas podemos encontrar «El acordaos» donde se le pide a la virgen María protección y socorro recalcando que somos pecadores y por eso se acude a ella, por una profunda devoción que se le tiene a la Virgen María. Por otra parte podemos encontrar «Bendita sea tu pureza» aquí se le recuerda la belleza de esta Inmaculada Virgen, y se ofrece de corazón la profunda fe que tiene el creyente a ella, para que esta no lo olvide.

Además podemos encontrar también «Bajo tu amparo» en esta oración el creyente se acoge en ella, y  se pide que no olvide las súplicas que le está pidiendo  y que los libre de todo peligro. «Ofrecimiento a la Santísima Virgen» en esta parte, la persona que está pidiendo a la virgen María se le ofrece en cuerpo y alma totalmente a ella, pidiendo a su vez que lo defienda y lo proteja como si fuera de su tal posesión.

Oración a la virgen María para obtener la conversión de un pecador

«¡Oh María, consuelo de cuantos te invocan!. Escucha benigna la confiada oración que en mi necesidad elevo al trono de tu misericordia. ¿A quién podré recurrir mejor que a ti, Virgen bendita, que sólo respiran dignidad y clemencia, que dueña de todos los bienes de Dios, sólo piensas en difundirlos en torno a ti, Se tu pues mi amparo, mi esperanza en esta ocasión, y ya que devotamente pende de mi cuello la Medalla Milagrosa, prenda inestimable de tu amor, concédeme, Madre Inmaculada, concédeme la gracia que con tanta insistencia te pido.»

En esta oración la persona le pide a la Virgen María que le conceda la gracia de fe y amor que se le añora en la plegaria, la persona debe tener puesta la Medalla Milagrosa, y repetir esta oración cuantas veces sea su agrado. Cuando hablamos de la conversión de un pecador  nos referimos a la transformacional del la persona que ha pecado y desea un cambio en su vida tanto espiritual como en su vida personal.

Oración a la virgen de la Medalla Milagrosa para curar a una persona enferma

«¡Oh María, sin pecado concebida, cuya inmensa bondad y tierna misericordia no excluye el alivio de este amargo fruto de la culpa que se llama enfermedad de la cual es con frecuencia víctima nuestro miserable cuerpo! ¡Oh Madre piadosa, a quien la Iglesia llama confiada ¡Salud de los enfermos! Aquí me tienes implorando tu favor. Lo que tantos afligidos obtenían por la palabra de tu Hijo Jesús, obténgalo este querido enfermo, que te recomiendo, mediante la aplicación de tu Medalla. Que su eficacia, tantas veces probada y reconocida en todo el mundo, se manifieste una vez más,  para que cuantos seamos testigos de este nuevo favor tuyo, podamos exclamar agradecidos, La Medalla Milagrosa le ha curado».

En esta plegaria a la virgen de la Medalla Milagrosa, las diferentes personas le piden la gran ayuda para que esta meta su mano poderosa y se pueda curar aquel enfermo por el que se está pidiendo. Para hacer esta oración es recomendable que se haga con mucha fe, y no tomar esta como algo insignificante, cuando se reza se espera que la persona devota al catolicismo sea capaz de comunicarse con la Inmaculada Virgen María, incluso con el mismo Dios. esto si se hace con mucha fe y respeto.

Oración a la Virgen de la Medalla Milagrosa para dar gracias por un recibido

«¡Oh dulce y gloriosísima Virgen María! He dirigido mis humildes súplicas a tu trono, y he conocido por experiencia que nunca se te invoca en vano, que tus ojos miran complacidos a quien en tu presencia se postra; que tus oídos están atentos a nuestras plegarias, que tus manos vierten bendiciones a torrentes sobre el mundo entero, y en particular sobre los que llevan con confianza la Medalla Milagrosa».

«¿Cómo pagarte, Madre Inmaculada, tanto favor? De ningún modo mejor que proclamando tu bondad y difundiendo por todas partes tu bendita Medalla, como me propongo hacerlo desde este día en testimonio de mi agradecimiento y de mi amor. Dame gracia, Madre mía, para llevarlo a cabo.»

En esta hermosa oración la persona devota a la Virgen de la Medalla Milagrosa, le da las gracias por todas aquellas cosas, favores, promesas y milagros que la Virgen le ha otorgado gracias a las clemencias de esta persona. Es por eso que se le hace la plegaria en reconocimiento a todos eso que logró gracias a la presencia de la Virgen María de la Medalla Milagrosa.

Oración al padre Juan Pablo Segundo

Al culminar la oraciones a la Virgen María de la Medalla Milagrosa, se le hace una oración al padre Juan Pablo Segundo, la cual va constituida por el «Ave María», haciendo esto se le da las gracias a Dios y la Virgen María por estar siempre presente en todos los momento de las personas, incluso en los momentos más difíciles, siendo ella siempre una guía de fuerza y esperanza, por eso los creyentes se encomiendan a ella. Seguido del primer «Ave María» se le hace la oración al Juan Pablo Segundo, y al culminar este se vuelve hacer otra «Ave María» ya para finalizar.

«Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte Amén».

«Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a Vos. Ésta es la oración que tú inspiraste, oh María, a santa Catalina Labouré, y esta invocación, grabada en la medalla la llevan y pronuncian ahora muchos fieles por el mundo entero. ¡Bendita tú entre todas las mujeres! ¡Bienaventurada tú que has creído! ¡El Poderoso ha hecho maravillas en ti! ¡La maravilla de tu maternidad divina! Y con vistas a ésta, ¡la maravilla de tu Inmaculada Concepción! ¡La maravilla de tu fiat! ¡Has sido asociada tan íntimamente a toda la obra de nuestra redención, has sido asociada a la cruz de nuestro Salvador!»

«Tu corazón fue traspasado junto con su Corazón. Y ahora, en la gloria de tu Hijo, no cesas de interceder por nosotros, pobres pecadores. Velas sobre la Iglesia de la que eres Madre. Velas sobre cada uno de tus hijos. Obtienes de Dios para nosotros todas esas gracias que simbolizan los rayos de luz que irradian de tus manos abiertas. Con la única condición de que nos atrevemos a pedírtelas, de que nos acerquemos a ti con la confianza, osadía y sencillez de un niño. Y precisamente así nos encaminas sin cesar a tu Divino Hijo».

«Te consagramos nuestras fuerzas y disponibilidad para estar al servicio del designio de salvación actuado por tu Hijo. Te pedimos que por medio del Espíritu Santo la fe se arraigue y consolide en todo el pueblo cristiano, que la comunión supere todos los gérmenes de división que la esperanza cobre nueva vida en los que están desalentados. Te pedimos por los que padecen pruebas particulares, físicas o morales, por los que están tentados de infidelidad, por los que son zarandeados por la duda de un clima de incredulidad, y también por los que padecen persecución a causa de su fe».

«Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén».

Oración a la Virgen María de la Medalla Milagrosa por los miembros de su asociación

«María, Madre de Nuestro Señor, con humildad pedimos que derrames tus bendiciones sobre todos los miembros de la Asociación de la Medalla Milagrosa. Bendice su generosidad que da vida a la devoción a ti y ayuda a promover la fe en tu Hijo, Jesús. Santísima María, así como lo hiciste con santa Catalina Labouré, derrama abundantes gracias sobre cada uno de los miembros de la Asociación, sobre sus familias y sus seres queridos».

«Madre mía, que tu Medalla Milagrosa sea un símbolo de paz, justicia y prosperidad en la vida de cada uno de tus devotos. Madre María, protégenos y ayuda a todos los que confiamos en ti, a ser fieles custodios de la vida que Dios nos ha dado. Te lo pedimos por tu Hijo, Jesús, con la confianza de que lo que pidamos por tu intercesión nos será concedido. Amén».

Aquí en esta oración le pide a la virgen María de la Medalla Milagrosa, por los diferentes miembros de su asociación a la Medalla Milagrosa, le ruegan para que ella los bendiga siempre en cada uno de sus pasos, y que ellos confíen cada día que pasa, más en ella, se le pide también por la paz y el amor de cada uno de sus fieles devotos, y que en nombre de su hijo Jesús ella los libre de todo mal. Esta Oración va constituidas por varias oraciones más, las cuales te mencionaremos a continuación:

Oración a la Virgen de los migrantes (María de la Medalla Milagrosa)

«Oh Santísima Virgen, tú acompañas por los caminos del mundo a los que expatrian en busca de trabajo y de pan. Tú que conoces también el exilio, mira piadosa nuestra condición y bendiciendo a quienes nos hospedan, vela, te rogamos, sobre todo a aquellos a quienes la necesidad obliga a dispersarse, y a quienes la fraternidad ajena acoge asociándolos al esfuerzo común de los propios trabajos».

«Tú, María, ayuda de los cristianos, consoladora de los afligidos, sé la madre amorosa de aquel que ha sido forjado por la suerte a vivir lejos de su patria, luchando ansiosamente por sí y por los suyos, y que con frecuencia no encuentra cerca de sí a quien comprenda plenamente sus penas, reanime sus fuerzas y levante con la voz de la sangre su espíritu abatido».

«Confortados por tu misericordia, socorridos por tu maternal providencia, defendidos por tu intercesión, haz, oh María, que unos y otros, nosotros los emigrados, nuestras familias inquietas por nosotros, todos sostenidos por la fe, la esperanza y la caridad, caminemos en el santo temor de Dios y, sumisos a la voluntad divina, fieles a Jesucristo y a su Iglesia, gocemos de los frutos de la justicia cristiana y merezcamos la paz en el tiempo y la perfecta felicidad en los siglos eternos. Amén».

ORACIÓN A LA MEDALLA MILAGROSA

Esta oración se le hace a la Virgen de La Medalla Milagrosa, donde se pide muchas fuerza y sabiduría para las diferentes personas que emprende un viaje  largo, ellos le dan las gracias por poner en su caminos a personas llenas de mucha bondad, que son capaces de darle un buen hospedaje, se encomiendan a la Virgen María de la Medalla Milagrosa para que esta seas la principal protección de su camino.

A esta Virgen María madre de Jesús hijo de Dios, quien murió por todos nosotros los pecadores, se le hacen una bellas letanías. Al culminar cada una de las Letanías a la Virgen María se le hace un rezo y se da por culminado la oración, las letanías están constituidas de la siguiente manera.

Letanías a la Virgen María de la Medalla Milagrosa

  • «Señor, ten piedad»
  • «Cristo, ten piedad»
  • «Señor, ten piedad»
  • «Cristo, óyenos»
  • «Cristo, escúchanos.»
  • «Dios, Padre celestial, ten piedad de nosotros»
  • «Dios, Hijo, Redentor del mundo, ten piedad de nosotros»
  • Dios, Espíritu Santo, ten piedad de nosotros»
  • Santísima Trinidad, que eres un solo Dios, ten piedad de nosotros»
  • «Santa María, ruega por nosotros»
  • «Santa Madre de Dios»
  • «Santa Virgen de las vírgenes»
  • «Madre de Cristo»
  • «Madre de la Iglesia»
  • «Madre de la divina gracia»
  • «Madre purísima»
  • «Madre castísima»

«Te rogamos nos concedas. Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo, y por la gloriosa intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las alegrías eternas. Por Cristo nuestro Señor. Amén»

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