El valor del perdón, en este artículo estudiaremos de una manera más profunda ¿qué es el perdón? ¿cuál es su importancia? Y luego de ello, probablemente se genere en ti una nueva consciencia, o mejor dicho, una nueva manera de percibir los momentos amargos.
Indice De Contenido
El valor del perdón
El valor del perdón: Antes de entrar en materia, es importante que conozcamos ¿qué es el valor del perdón? El perdón, es considerado un valor de la condición humana. Por una parte, permite que la persona que cometió la ofensa contra nosotros, solicite perdón, y el ofendido, tiene la posibilidad de liberarse también de toda rabia, rencor o cualquier otro sentimiento de vibración baja.
Esto no quiere decir, que el que haya cometido la falta no deba buscar la manera de compensar su error, por el contrario, debe asumir su responsabilidad y actuar con inteligencia y mostrarse humilde para que pueda ser perdonado.
El valor del perdón: Probablemente en muchas ocasiones hemos escuchado hablar sobre el perdón, lo importante que es para nosotros y los beneficios que aporta a nuestra vida, sin embargo, hay preguntas que nadie nos suele hacer, como por ejemplo:
¿Qué áreas de nuestra vida no hemos sanados aún?
¿Qué nos impide hacerlo? ¿Sabemos pedir perdón?
¿Perdonamos de verdad o solo lo decimos para quedar bien con el otro pero guardamos rencor en nuestro corazón?
El valor del perdón se encuentra en el saber perdonar y hacerlo de corazón normalmente está sobrevalorado, aunque, aprender a pedir perdón también es importante porque de alguna manera es aceptar nuestra responsabilidad, reconocer nuestros errores y el daño que hemos causado a esa otra persona.
Los expertos en el área de la psicología afirman que tanto perdonar cómo pedir perdón, son acciones sumamente positivas, con efectos terapéuticos maravillosos; pedir perdón es “disculparse” con el otro de corazón.
En la mayoría de las religiones (por no decir todas) incluyen como parte de su doctrina el sacrificio, el arrepentimiento o el valor del perdón como una manera de comunicarnos un mensaje, de conducirnos y orientarnos hacia un camino, ese camino, es Dios.
En muchas escrituras consideradas sagradas se destaca el valor del perdón como una herramienta que nos permite sanar y que con diversos rituales, terapeutas y profesionales podemos sanar nuestras heridas.
En el mundo espiritual perdonar complemente es, ver al otro inocente y liberarlo de toda culpa. Quizás, en más de una ocasión te has preguntado ¿y por qué debo perdonar al otro? Si me ha hecho tanto daño y me ha lastimado.
El perdón, no es algo que le damos a la otra persona, ni un acto de misericordia para con los demás, el valor del perdón para niños se manifiesta cuando comprendemos que se trata de un acto de amor que tenemos con nosotros mismos al liberarnos de esa carga que solo llena nuestro corazón de rabia, amargura y rencor.
No es algo que le des al otro, el perdón es para nosotros mismos. El acto de misericordia es contigo, con tu cuerpo, con tu salud y con tu mente, una promesa de olvido, sin embargo, lastimosamente, nos han enseñado que el perdón es un acto (casi obligado) en el que tenemos que perdonar al otro.
Si bien es cierto que perdonar es importante, debemos destacar que nadie puede obligarnos a ello. Date el permiso de sentir cualquier cosa, pero luego, déjalo ir y continúa.
Probablemente, en algún punto de tu vida te has preguntado ¿qué me hace falta para ser feliz? Aceptarnos a nosotros mismos y apreciarnos desde el amor, reconocernos, como un ser maravilloso, comprendiendo, que tal y como somos, somos perfectos porque estamos hechos a imagen y semejanza de Dios.
Cuando empezamos a amarnos de verdad y con tofo nuestro corazón, cuando nos aceptamos de manera amorosa, dejaremos de atraer personas a nuestra vida que solo nos causen dolor y nos hagan sentir pequeños y débiles.
Para reconocer el valor del perdón es importante reconocer primero nuestra locura interna, es decir, nuestras creencias, exigencias, límites, miedos, así y solo así, empezaremos a atraer personas positivas, que vibren en nuestra misma frecuencia, que nos aportan y suman.
En ocasiones, atraemos a nuestra vida a una pareja celosa, posesiva, controladora… y no entendemos por qué le hemos atraído si nosotros “no somos así”. Si analizamos de manera sincera, nos daremos cuenta de que nuestra manera de exteriorizar estos patrones son simplemente distintos.
Cada persona que atraemos a nuestra vida, entra a ella con una intención, para enseñarnos algo y para reflejarnos aquello que nos negamos a aceptar.
El perdón de los niños y las niñas
Cuando alguien nos lastima, nuestra primera reacción (y natural) es reacciona con rabia en contra de ese individuo, es lógico, este acto es similar a la mordedura de una serpiente y el efecto inmediato d su veneno.
Por ello, cada vez que experimentamos un episodio de rabia, injusticia, venganza, o cualquier otro de similares a este, nos lastimamos a nosotros mismos, pues estamos experimentando de nuevo este sentimiento y es allí donde debemos recordar el valor del perdón.
El perdón para los cristianos
Jesús, siempre sabio, nos invita a través de la escritura a ser misericordiosos y a perdonar de corazón a todos aquellos que nos ofenden, así como a él, le han ofendido.
En más de una ocasión los fariseos se burlaban de Jesús y de sus enseñanzas, sin embargo, Jesús en vez de ofenderse aceptaba sus invitaciones, los escuchaba con atención y comprendía que lo ofendían por su ignorancia.
¿Qué no es perdón?
- Perdonar no implica que tenga que existir una reconciliación.
- Perdonar no es lo mismo que olvidar.
- Expresar que hemos perdonado pero seguir viendo a esa persona como culpable.
- No es levantar un castigo, sino que el otro busque la manera de compensarnos por su falta.
- Perdonar no es para nada un acto de debilidad.
Actitudes negativas que van en contra del perdón
- Cuando sentimos deseo de venganza, rencor u odio hacia otros.
- Nos sentimos ofendidos porque no fuimos invitados a un evento o no nos incluyeron en un reconocimiento y eso genera en nosotros sentimientos negativos.
- Cuanto mal interpretamos actitudes o gestos de otros.
Pedir perdón a nuestro Dios Padre
Dios nos invita a perdonar a nuestros hermanos a pesar de las ofensas que pudiesen cometer contra nosotros y a recordar el valor del perdón cada vez que nos ofenden.
También, nos expresa, que pedirle perdón diariamente por nuestras ofensas, debe convertirse en un hábito de nuestra vida cotidiana.
Jesús, siempre está dispuesto a perdonarnos, pero este no es un hecho que se dé por sí solo, debemos reconocer ante Dios nuestras faltas, sentirnos arrepentidos genuinamente, y luego, implorar el perdón de Dios, es así, como Dios nos ofrece el valor del perdón.
Cada vez que nos sintamos abandonados u ofendidos de alguna manera por amigos o familiares debemos recordar a Jesús, que incluso, el día de su muerte, perdonó a los soldados y pidió a su padre que los perdonara y fuese misericordioso con ellos.
Jesús, nos demostró de mil formar el valor del perdón, e hizo esta petición a su Padre que aquellos hombres que le lastimaban, ese pueblo que le humillaba, gritaba y anhelaba su muerte, actuaba de esa manera consecuencia de su ignorancia y de no poseer a Dios en sus corazones.
El estar alejados del camino de Dios endurece nuestro corazón, nos hace crueles e indolentes y no nos permite reconocer el valor del perdón.
¿Te gustó este artículo? Te invitamos a continuar leyendo más en:
La Renovación Carismática Católica: Significado
Diálogo y Comunicación en la familia ¿Qué significa?
¿A dónde voy?¿Quién soy?¿De dónde vengo?