San Francisco de Asís fue un renombrado Santo de Italia el cual atrapó la imaginación de sus coetáneos por sus demostraciones de humildad, castidad y observancia religiosa. Esta recopilación de Frases de San Francisco de Asís nos aproxima al ideario religioso del creador de la Orden Franciscana. Entérate de mucho más a continuación.
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Frases de San Francisco de Asís
A continuación conseguirás de San Francisco de Asís frases y pensamientos en gran número, los cuales calan hondo en las mentes y corazones de todos, primordialmente por la ecuanimidad de su contenido y por su vigencia que llega hasta nuestros días.
Han tenido tanto alcance estas sentencias que muchas de ellas han sido dedicadas a él como la oración a San Francisco de Asís.
Frases de San Francisco de Asís: Dios, Fe y Religión
– No hay otra cosa que hacer sino estar dispuestos a seguir la voluntad de Dios y en satisfacerle en todas las cosas. (De acuerdo a San Francisco de Asís, los humanos hemos de escuchar y propagar los mandamientos divinos. Agradecer a Dios es una manera de ser humildes y benévolos).
– La tentación derrotada es, en cierta manera, el anillo con que el Señor se compromete con el corazón de su siervo. (Una proverbio para causar nuestra reflexión).
– Conságrate a ti mismo y consagrarás a la sociedad. (La salvación espiritual debe comenzar por uno mismo).
– Todo el bien que realicemos, hay que hacerlo por devoción a Dios, y el mal que dejemos de hacer hay que prevenirlo por devoción a Dios. (Una filosofía fundamentada en la aproximación a la bondad).
– Cuando no hay oración no se puede prosperar en el servicio divino. (Un ceremonial que hace distinción entre devotos y devotos practicantes).
– Afortunado quien no tiene más placer y alegría que las palabras y hechos del Señor. (Frase que compendia su amor y fervor por Dios).
– Jesucristo le dijo amigo a aquel que lo traicionaba y se ofrendó de manera espontánea a los que lo crucificaron. (Es un manifiesto a la bondad sin límite del emisario de Dios).
– Pregona el evangelio en todo tiempo y cuando haga falta utiliza palabras. (Una sentencia para aplicar a diario y una manera de comunicarse de modo religioso).
– El hombre habría de temblar y el mundo estremecerse, el cielo íntegro habría de conmoverse profundamente al aparecer el hijo de Dios sobre el altar en las manos del clérigo. (Unas palabras con las que se agradece al emisario de Dios).
– Si Dios puede obrar por medio de mí, puede obrar por medio de cualquiera. (Omnipresente y omnipotente).
– Si hay hombres que excluyen a cualesquiera de las criaturas de Dios de la protección, de la piedad y la conmiseración, habrá hombres que darán trato similar a sus hermanos. (La benevolencia debe ser predicada de forma altruista y continua).
– La oración diaria nos hace bondadosos. (Otra sentencia acerca de la perseverancia en la devoción cristiana).
– Adoremos a Dios y amémosle con corazón humilde. (Sin gran alharaca, amar a Dios cuenta con un camino humilde).
– Espíritus perversos y falsos, pueden hacer conmigo todo lo que quieran. Conozco muy bien que no pueden hacer más de lo que la mano de Dios posibilite. De mi lado, tengo voluntad de padecer con gran gusto todo lo que él deje. (Una expresión destinada a la maldad, en tono provocador).
– La plegaria nos acerca a Dios, aunque Él usualmente esta cerca de nosotros. (Una importante frase para entender la omnipotencia del ser supremo).
– El hombre, al no ser dueño de nada propio, entonces él le pertenece a Dios. (Una insólita noción de la propiedad humana).
– Si tú, siervo de Dios, estás inquieto, has de recurrir de inmediato a la plegaria e inclinarte ante el Señor hasta que te retorne la alegría. (De acuerdo a San Francisco de Asís, el desasosiego se soluciona regresando a la oración).
– No ha de servir para nada el andar a cualquier sitio para evangelizar, solo en el caso de que el camino sea nuestro evangelio. (Una pensamiento de San Francisco de Asís acerca del evangelio).
– Oh Señor, que yo no buscaba ser consolado, cuanto consolar, ser entendido, cuanto entender, ser adorado, cuanto adorar. (Otra expresión acerca de la relevancia de dar sin aguardar nada a cambio).
– De mayor importancia que la gracia y obsequios que Cristo otorga a sus amados, está el sobrepasarse a uno mismo. (Adoración total a Jesucristo).
– ¡Horrible es la muerte!, pero ¡cuán codiciable es igualmente la vida del otro mundo, a la que Dios nos convoca! (Perspectiva ambivalente acerca de la muerte).
– Señor, a mí, penitente e indigno, me has mandado del cielo este consuelo y dulzura; te las retorno a ti para que me las apartes, pues yo soy el que roba de tu tesoro. (Una loa a la benevolencia de Dios).
– Él busca por arriba de todo; y hemos de hacer siempre en ellos estancia y morada para aquel que es el señor Dios omnipotente, Padre, e Hijo, y Espíritu Santo. (Otra sentencia destinada a la atención de Dios).
– El diablo se contenta, particularmente cuando logra despojar de su júbilo al corazón del siervo de Dios. Colma de polvo las grietas más modestas de la conciencia que puedan ensuciar la inocencia del espíritu y la castidad de la vida. Pero al colmar los corazones de alegría espiritual, la serpiente arroja en vano su veneno mortal. (Acerca del demonio y sus vicios. La aflicción y la rabia son contradictorios con la devoción cristiana).
– El siervo de Dios debe resplandecer por su vida y virtud. (El ejemplo es la más importante virtud de un creyente).
Frases de San Francisco de Asís: Perspectiva de Vida
– Señor, conviérteme en instrumento de tu paz. Si hay odio yo sembraré amor; Si hay injuria, perdón; si hay incertidumbre, fe; si hay desaliento, esperanza; si haya oscuridad, luz; si hay aflicción, alegría. (Desechar lo negativo para restaurar lo afirmativo).
– Es tras la muerte como se resucita a la vida perpetua. (Expresión que acopia su perspectiva acerca del más allá).
– Todos los hermanos han de predicar por medio de sus obras. (Nuestras acciones hablan por nosotros de manera evidente y transparente).
– Requiero de escasas cosas y las pocas que requiero, las requiero poco. (Una perspectiva austera que fue una de los fundamentos éticos de la Orden Franciscana).
– Ocupar tiempo en buscar fallas en el prójimo es indicio suficiente de no ocuparnos nada en las propias. (Tiene mayor valor enfocar nuestra atención en lo mejor que podemos ser nosotros mismos).
– Es dichoso quien nada guarda para sí. (La sobriedad es la que nos conduce a la felicidad).
– Ten presente que cuando abandones este mundo, no puedes llevar contigo nada de lo que recibiste; solo de lo que has dado, un corazón colmado y enriquecido por un servicio íntegro, amor, sacrificio y arrojo. (Bella frase de San Francisco de Asís).
– Por una modesta recompensa se ha de perder algo que es incalculable y fácilmente hace que quien otorga no de más. (Reflexión apropiada que nos hace meditar en el daño que ocasiona el egoísmo).
– Cuando uno se entrega, se recibe, cuando uno se olvida de sí mismo, es como uno se encuentra. (La autorrealización es un curso que puede tener una duración de años).
– Quien obra con sus manos es un trabajador. Quien obra con sus manos y su mente es un artesano. Quien obra con sus manos, su mente y su corazón es un artista. (Trabajador por excelencia. La inventiva al servicio de la sociedad. El punto más elevado de la creación cultural: el arte).
– Donde hay caridad y erudición, no hay miedo ni desconocimiento. Donde hay serenidad y humildad, no hay rabia ni inquietud. (La formula “mágica” contra la desdicha).
– Toda la oscuridad existente no puede extinguir la luz de una única vela. (Alegoría que podemos aplicar a diferentes contextos).
– Un rayo de sol basta para hacer rehuir a muchas sombras. (Una alegoría que se puede aplicar a numerosos contextos).
– Empieza haciendo lo necesario; después haz lo posible y súbitamente estarás haciendo lo imposible. (Importante filosofía para implementar proyectos de toda clase).
– La erudición no se alcanza en base a la experiencia y las lecciones que se aprendieron. (No existe otra manera de desarrollarse).
– Cuando damos es cuando recibimos. (Sentencia acerca de la relevancia de compartir).
– Es siervo leal y sensato el que por cada culpa en que incurre, se da prisa para espiarla: internamente, por el remordimiento y exteriormente por la revelación y la satisfacción de obra. (Acerca de las virtudes de un devoto leal).
– Luchemos por lograr la tranquilidad de aceptar las cosas ineludibles, el valor de alterar las cosas que podamos y la erudición para poder diferenciar unas de otras. (Una sentencia para hacerla parte de nuestra diario vivir).
Frases de San Francisco de Asís: Amor y Compasión
– Al tanto que proclamas la paz con tus labios, se atento en tenerla aún más completamente en tu corazón. (Acerca de la relevancia de evitar ser hipócrita. Jamás digas algo que no es tu sentir).
– Solo otorgando perdón recibimos perdón. (Únicamente cuando seamos capaces de ser humildes recibiremos el perdón por nuestros pecados).
– Adora a tus enemigos y haz el bien a quienes te odian. (Expresión de espíritu cristiano en que el bien debe estar por encima de las situaciones adversas).
– Cuánto amor se necesita de cada uno para adorar y alimentar a su hermano en el espíritu. (Reflexión sobre dar de nuestro amor para que otro lo disfrute).
– Hemos sido convocados para sanar las heridas, para juntar lo que se ha separado y para conducir a casa a los que han extraviado su camino. (El santo italiano, acerca del propósito de las personas cristianas).
– La cordialidad es hermana de la compasión, que sofoca el odio y promueve el amor. (La amabilidad, el altruismo y los buenos modales usualmente suman).
– La humildad es la virtud divina por la que todo lo terreno y temporal es pisoteado, y por la que todos los impedimentos se repliegan del alma para poder llegar en libertad a unirse con el Señor Dios eterno.
– La humildad igualmente es la virtud que ocasiona que el alma, al tanto que está en la tierra, platique con los ángeles en el cielo.
– La humildad le hizo compañía a Cristo en la cruz, fue enterrada con Cristo en la sepultura, y con Cristo resucitó y subió al cielo.
– La humildad inclusive en esta vida proporciona a las almas el poder de volar al cielo, y sólo ella cuenta con la armadura de la genuina modestia y caridad.
Frases de San Francisco de Asís: Animales y Ecología
– Dios hizo la creación de todas los seres con amor y bondad, grandes, pequeños, de forma humana o animal, todos son hijos del Padre y fue tan correcto en su creación que proporcionó a cada uno su propio ambiente y a sus animales un hogar colmado de ríos, árboles y campos hermosos como el mismo edén. (Acerca de la maravillosa lógica de la naturaleza).
– Los animales son mis amistades y yo no me como de ellas. (Una expresión vegana que es chocante con el contexto medieval).
– Así como ciertos animales comen de otros para sobrevivir, Dios le señalo al hombre que podía tomar los animales que requiriese solo hasta conseguir una mejor solución, no para veleidosos vestidos o hacerles sus esclavos o distracción. (Puedes alimentarte de animales únicamente si no hay una alternativa más razonable).
– Cada ser en desdicha cuenta con el mismo derecho a ser protegido. (La benevolencia no se le debe prohibir a nadie).
– Mi Dios gracias, por la bella luna y las estrellas; en el cielo las has creado, lindas y bellas.
– Gracias mi Dios, por la hermana brisa y aire, y las nubes y las tempestades, y todo el tiempo, por medio del cual le das alimento a las criaturas.
– Alabado seas, mi Dios, por la hermana agua; ella es de gran utilidad y humilde y bella y casta.
– Alabado seas, mi Dios, por el hermano fuego, por el cual iluminas la noche. Él es hermoso y alegre, y vigoroso y fuerte.
– Te agradezco, mi Señor, por nuestra hermana la madre tierra, la cual nos mantiene y nos domina, y genera variados frutos con multicolores flores y hierbas.
Frases de San Francisco de Asís: De lo Cotidiano
– Tus actos pueden ser el único sermón que ciertas personas oigan hoy. (Los hechos valen más que las palabras, de acuerdo a esta frase de San Francisco de Asís acerca de la importancia de dar ejemplo con hechos).
– La plegaria es un genuino descanso. (Únicamente en ese ritual, de acuerdo a San Francisco de Asís, nuestra alma descansa).
– La auténtica enseñanza que impartimos es lo que experimentamos; y somos apropiados predicadores al poner en práctica lo que decimos. (La ejercitación y la vivencia de cada uno son esenciales para ser un ejemplo ético).
– Allí donde predominan la tranquilidad y la meditación, no hay sitio para el desasosiego ni para la disipación. (Acerca de la calma y sus beneficios para nuestra mente).
– Empecemos a servir, y hagámoslo con nuestro mejor empeño. Lo que hasta ahora hemos logrado es poco y nada. (Siempre se puede logra más y de mayor calidad).
– Aquel que obedece a Dios no ha de obedecer a otro hombre, sino a quien por cuyo amor le ha otorgado su obediencia. (Una prueba de respeto y adoración).
– No me santifique muy tempranamente. Cuento con toda la capacidad de engendrar un hijo. (Una sarcástica expresión acerca de la santificación en vida).
– No luchen entre sí y con los otros, sino traten de contestar con humildad diciendo, “Soy un siervo incompetente.” (Desde la humildad se pueden solucionar todas las diferencias).
– Se paciente con todas las cosas, pero particularmente contigo mismo. (Una meditación que ha de hacernos valorar la quietud y la serenidad ante nosotros mismos).
– Vayan, carísimos, de dos en dos por distintas partes del mundo proclamando a los hombres la calma y la penitencia. (Ruego destinado a las personas de buen corazón).
Otras Frases de San Francisco de Asís
– Quiere de veras a tu enemigo, el que no se conduele de la ofensa que se le hace, sino que por adoración a Dios, se atormente por el pecado que existe en su alma.
– El auténtico progreso se da en voz baja, de modo perseverante y sin previo anuncio.
– No has de calificar de enemigo a nadie, todos son tus bienhechores, y nadie te perjudica. No cuentas con enemigos, exceptuando a ti mismo.
– Conserva un ojo claro cuando te acerques al final de la vida. No puedes olvidar tu misión y destino como hijo de Dios. Lo que está al frente de él es lo que eres y no más.
– Alabado seas, mi Dios, por quienes perdonas por tu amor; mediante los que padecen enfermedad y tribulación. Felices los que soportan en paz, ya que ellos serán coronados.
– Es más grande la victoria del diablo cuando nos puede arrebatar la alegría del Espíritu.
– El diablo carga el polvo fino con él en modestas cajas y las disemina por medio de las grietas de nuestra conciencia con la finalidad de debilitar el empuje puro del alma y su brillo.
– Si creen que son abandonados en su aflicción, melancolía… la tristeza los acabará poco a poco y se consumirán en desvíos que no conducen a ningún lugar.
– Al echar raíces la aflicción, crece el mal. Si no se disuelve a causa de las lágrimas, se hace un daño duradero.
– Señor, alumbra las tinieblas de mi corazón y otórgame una fe derecha, una esperanza fiable, una compasión perfecta, sentido y entendimiento, para que pueda ejecutar tu santo mandamiento.
– Te amamos, oh Señor, y te alabamos, ya que por tu santa cruz salvaste al mundo.
– Jesús, el de mayor inocencia, que aunque no lo hizo ni podía cometer pecado, fue sentenciado a muerte, y por otro lado, a la muerte más vergonzosa de la cruz.
– Para continuar manteniendo amistad con el César, Pilatos lo ofreció a manos de sus enemigos. Un monstruoso crimen.
– Pilatos reprobó la inocencia hasta el fallecimiento, y con ello pretendió ofender a Dios con la finalidad de no enfadar a los hombres.
– Para quien después voy a vivir, si no fuese por ti, mi Dios?. Dado el caso de que desee complacer a los hombres, no podría ser su siervo.
– Él me indicó que deseaba que yo fuese un nuevo loco en este mundo.
– La riqueza usualmente confunde la ambición y la avaricia con los cuidados de este mundo.
– La gracia y las facultades que Cristo da a sus devotos les otorga poder de vencerse a uno mismo.
– Allí donde existen heridas permíteme sembrar el perdón.
– Hemos de buscar no tanto para rezar, sino para transformarnos en oración..
– Los demonios no son los que te han llevado a la cruz, eres tú quien con ellos te has hecho crucificar y prosigues crucificándote aun, recreándote en los vicios y en los pecados.
– No es adecuado, cuando uno es siervo de Dios, tener un rostro triste o una mirada de temer.
– Permitámonos convertir en Jesús por la fortaleza de su amor y compasión.
– No hemos nunca de querer estar por encima de los otros. En contraste, hemos de ser siervos obedientes a todo ser humano, por el bien del Señor.
– Bendito el siervo a quien lo consiguen en medio de sus inferiores con la misma humildad como si estuviese en medio de sus superiores.
– Al verte más tentado, has de saber que eres más adorado.
– No atesoren nada de ustedes mismos con la finalidad de que completos los reciba el que se da por integro.
¿Quién era San Francisco de Asís?
San Francisco de Asís nace con el nombre de Giovanni di Pietro Bernardone en la ciudad de Asís de la Provincia de Perugia en Italia en el año 1181 falleciendo en la misma localidad en el año 1226. Fue un beato, diácono y creador de la Orden Franciscana, de la congregación llamada Hermanas Clarisas y la Tercera Orden Seglar, las cuales surgieron bajo la jerarquía de la Iglesia católica en el Medioevo.
Perfil Religioso
Sobresalió como una de las más importantes figuras de la espiritualidad en la historia del cristianismo. A pesar de haber sido hijo de un adinerado comerciante de la ciudad en sus años jóvenes, más tarde vivió en la más rigurosa pobreza y obediencia de los Evangelios.
Estando en Egipto, trató de convertir al cristianismo de manera infructuosa a los musulmanes. Su existencia religiosa fue frugal y sencilla, por lo que alentaba a sus prosélitos a proceder de la misma manera. Tal modo de vida no tuvo la aceptación de algunos de los recientes integrantes de la orden al tanto esta crecía; pese a ello, Francisco no fue contrario a una reorganización.
El Pobre de Asís
A él se le conoce como el primer caso en la historia con presencia evidente y externa de estigmatización. Fue santificado por la Iglesia católica en 1228, y su festividad se conmemora el 4 de octubre. En italiano se le conoce igualmente como «il poverello d’Assisi», lo que significa, «el pobrecillo de Asís» y se le considera el santo patrón de los animales y de los ecologistas.
Francisco ha permanecido como aquel quien, en su espíritu de pobreza y altruismo, posiblemente más se asemejaba a Jesús en la historia de la cristiandad. El «Pobre de Asís» sigue creando conmoción por su capacidad de reconciliarse con todo y con todos, admirado no sólo por devotos de todas las religiones, sino igualmente por no creyentes.
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