Reflexiones sobre la Familia Cristiana: ¿Qué es?

En el artículo de hoy te traemos las mejores reflexiones sobre la familia según el cristianismo, para aplicarlas a tu día a día y enseñarlas a tu familia cristiana.

reflexion sobre la familia

Reflexiones sobre la familia

Las reflexiones para la familia son frases cortas que nos ayudan a recordar al gran y valioso tesoro que tenemos a nuestro alrededor: nuestra querida familia. Cristo nos enseña a amar a nuestros familiares de forma incondicional, con respeto y honestidad. No debemos hacerles daño y siempre debemos confiar en ellos.

En casi todas las culturas y religiones la familia denota gran importancia y valor, poniendo como prioridad las relaciones entre todos los miembros que la conforman. Como hemos mencionado, la familia es una parte muy importante en nuestras vidas y dentro de la sociedad en general.

Los lazos que unen a los familiares son muy fuertes y casi indestructibles. Sin embargo, a veces pueden surgir problemas que afecten nuestra relación familiar, llegando a causar fisuras que podrían convertirse en barrancos insalvables si no resolvemos nuestros problemas desde el amor y la honestidad, como es la Voluntad de Dios.

Las reflexiones sobre la familia consisten en historias sobre el tipo de situaciones que mencionamos, esas que pueden acabar con una buena relación entre los miembros familiares. Dichas reflexiones nos dicen que cada problema puede ser solucionado, nada tiene la importancia suficiente como para que los hermanos se enojen o los hijos dejen de hablar con sus padres.

Es importante enseñar, también, estas reflexiones sobre la familia para niños, si hay alguno en casa. Pues desde pequeños, sabrán que la familia siempre va primero y que ningún conflicto debe ponerse sobre los lazos familiares. Estos lazos van más allá se la sangre. También se basan en el respeto y la honestidad, en el amor, la compasión y la empatía. Todos estos valores son importantes para mantener una familia unida. Adicionalmente, escuchar y ser escuchados dentro de nuestro núcleo familiar es un elemento clave para entendernos entre nosotros y al mismo tiempo poder ayudarnos, aliviar nuestras tristezas y arreglar nuestros errores.

Algunas reflexiones sobre la familia hablan sobre el respeto y la unión entre cada miembro que conforma el núcleo familiar. También se hace hincapié en crear nuestras propias tradiciones, esas que disfrutemos en familia, haciendo la unión y el amor entre los miembros de la familia crecer cada vez más.

La familia siempre puede crecer, pero mayormente crece cuando los hijos hacen su propia familia, teniendo hijos y al contraer matrimonio. Con respecto a las tradiciones, las reflexiones familiares comentan que tener cosas en común nos une, pues compartimos e incrementamos nuestros lazos a través de algo que disfrutamos y amamos realizar juntos.

Una de estas reflexiones dice que la familia es el seno en donde se fomentan las creencias espirituales. Por lo tanto, debemos enseñar a nuestros hijos y otros miembros de la familia sobre nuestro Señor, sus mandamientos y todo lo que ha hecho por nosotros. Según las obras de misericordia, es nuestro deber alejar a nuestros hermanos de los caminos del pecado. Como familiares, es nuestra responsabilidad que cada miembro que une a la familia sepa quién es nuestro creador y aprenda a diferenciar entre el bien y el mal.

A su vez, quienes desean haber nacido en otra familia se rechazan a sí mismos. Es por eso que debemos reforzar el amor hacia nosotros mismos, demostrarnos que somos lo suficientemente valiosos como para recibir el amor de otros, orar por ello y de esa manera, amaremos a nuestra familia tal y como es, pues Dios nos colocó dentro de ella por una razón. Y debemos honrar a nuestros padres, hermanos e hijos.

Cuando sentimos que algo nos falta, siempre que regresemos a casa lo encontraremos en nuestra familia, en su amor, aceptación y bondad. El hombre que siente que le falta algo, al dar la vuelta a casa lo encontrará. Porque la familia es nuestro principal pilar, el que nos sostiene como personas y como sociedad. Nuestros familiares conocen nuestros defectos y los aceptan con paciencia y amor, conocen nuestras tristezas y las alivian, conocen nuestros tormentos y nos aconsejan cada vez que lo necesitamos, siempre guiándonos en el camino del bien.

La familia es el mayor tesoro

La familia es nuestro mayor tesoro, así como nuestro lugar en el mundo. Somos humanos, reales, cometemos errores, pedimos perdón, peleamos y damos segundas oportunidades. A la vez, somos ruidosos, tenemos paciencia y sobre todo, nos amamos profundamente. Nuestra familia es nuestro hogar, es ese lugar inmenso al que sabemos que siempre podeos acudir y regresar si asó lo necesitamos.

Por otra parte, la familia es como un pañuelo que seca nuestras lágrimas, acariciando nuestras almas y aliviando nuestros dolores. Nuestro hogar nos arropa del frío, nos brinda tanto infancia como madurez, pues en ella hemos crecido. Allí aprendemos de nuestros errores y los superamos en equipo.

Los abrazos y besos por parte de nuestros familiares nos brindan las respuestas a todas las preguntas de qué, por qué, cómo y dónde. En nuestra familia, forjamos valores nuevos cada día, con los que moldeamos nuestros sentimientos, formas de actuar hacia otros y aumentamos nuestra bondad.

A la familia le pertenecen todos nuestros secretos, nuestras mejores sonrisas y nuestros mayores desvelos. En ellos encontramos el amor y la calma que nuestro corazón necesita, de forma incondicional y en cualquier momento. El amor familiar es el más puro y honesto.

Si te ha gustado este artículo, te recomendamos leer también:

(Visited 1.664 times, 1 visits today)

Deja un comentario